LAS MONEDAS DE VARO
Entre el conjunto de monedas halladas en Kalkriese destacan aquellas que presentan las iniciales VAR, en su mayoría denarios, ases y semis; como prueba de que en aquellos parajes se desarrolló la clades variana se ha argüido que las letras VAR se correspondían a la marca de Publius Quinctilius Varus, legatus Augusti pro praetore ad Germania Magna.
Sin embargo, las letras VAR se han encontrado también en más de 500 piezas arqueológicas de diverso tipo en un arco que va desde la Galia al Rin y hasta el Danubio.
Los argumentos a favor de la hipótesis que las monedas con el cuño VAR fuesen emitidas por Publio Quintilio Varo radican en que éste, como gobernador de Germania, tenía autoridad para acuñar monedas; en las provincias orientales del Imperio romano era frecuente que los gobernadores imprimieran su sello en las monedas: así queda atestiguado que tanto en Siria como África Varo así lo hizo (poniendo su efigie en las monedas y con las marcas VAR, PVAR y QVAR). Por todo ello, y aunque en Occidente no era habitual, no es impensable que Varo hiciese lo mismo en Germania.
Quizás, al llegar a Germania como gobernador, quiso dar un regalo a sus tropas, un donativum y como testimonio del hecho, decidió marcarlas com las siglas VAR, o bien que simplemente decidió dejar su cuño en todas aquellas monedas que se habían emitido bajo su gobierno.
En los restos del campamento romano de invierno de Haltern se hallaron también monedas romanas con la misma marca. Cabe suponer que el hecho de hallar tantos ases y semis -monedas fraccionarias de cobre que se usaban para pagos menores y cotidianos- con la marca VAR fuesen consecuencia de las transacciones durante la preparación de una campaña estival en el corazón de Germania, con los pagadores romanos arreglando cuentas con sus proveedores antes de partir, o de los anticipos dados a las tropas.
En cuanto al hecho que a lo largo de Galia y el Danubio aparezcan las monedas con el anagrama VAR cabe decir que puesto que el mando de Varo se extendía por los territorios de Germania Inferior y Superior es lógico pensar que el radio de dispersión de estas monedas fuese muy amplio y que alcanzase las zonas limítrofes, tanto de la Galia como de Raetia, Panonia y el Danubio, y que incluso muy posteriormente a la clades variana estas monedas siguieran circulando. Además, teniendo en cuenta que Roma realizó grandes movimientos de tropas para acudir en la defensa de Germania Inferior, los soldados y mercaderes desplazados utilizasen estas monedas tras su regreso a sus zonas de origen.
Sin embargo, los anteriores argumentos han sido refutados para negar que Kalkriese sea el lugar de la batalla. Así, en cuanto a la gran dispersión de las monedas con la marca VAR cabe decir que parece sorprendente que Augusto y Tiberio permitiesen que las monedas con el recuerdo de Varo recorriesen la frontera germana y territorios limítrofes; la figura de Varo sufrió una damnatio memoriae casi desde el primer momento de conocerse la derrota: Augusto culpabilizó a su legado de todos los males; no en vano su famosa frase “Quintilio Varo, devuélveme mis legiones” expresa bien los sentimientos y el rencor del emperador contra el hombre que había permitido la aniquilación de 3 legiones y unidades auxiliares a manos de unos “salvajes”, algo inconcebible desde hacía más de un siglo.
Además, algunas de las monedas con las iniciales VAR también llevan las siglas TIBAVC y TIB, que se corresponen a marcas del emperador Tiberio, cosa imposible puesto que Tiberio accedió al trono en el año 14 d.C.
La controversia ciertamente existe, aunque mayoritariamente se sigue pensando que la zona de Kalkriese fue uno de los lugares de la batalla. Cabe recordar que las legiones fueron hostigadas a lo largo de varios días y aunque las fuentes no son muy concretas cabe pensar que tras aquellos combates sus fuerzas estaban muy disminuidas, por lo que la emboscada urdida por los germanos en aquel paso estrecho bien pudo suponer la agonía final de la columna romana; pensar en Kalkriese como un campo de batalla como Cannas, Zama, Arausio o Filipos supone un error, puesto que no se desarrolló una batalla campal, sino una lenta maniobra de hostigamiento y desgaste que condujo al colapso de la resistencia romana.
Saludos.
NOTA.- El presente artículo forma parte del material en reserva del libro Aguilas en Germanía.