El tifón “Cobra” de 1944, también se le conoce en los anales de la USNavy como el tifón “Halsey”, por haber causado graves daños a la 3ª Flota de los Estados Unidos al mando del almirante Halsey.
USS Cowpens durante el Tifón Cobra 18 December 1944.
Este almirante tuvo verdadera mala fortuna con los tifones en las últimas etapas de la Guerra del Pacifico, y también buenos “padrinos” como el almirante Nimitz, que le permitieron seguir al frente de la 3ª Flota después de estos sucesos.
El 17 de diciembre la TF-38 se encontraba a 300 millas al este de Luzón preparándose para petrolear y recibir abastecimientos, los pequeños destructores estaban con los tanques casi secos, 10-15% de su capacidad, cuando se informó de la formación de un tifón en las proximidades, pero se cometió un error al enviar la dirección hacia la que se movía.
Halsey ordenó variar el rumbo para sortear el tifón, pero desgraciadamente puso rumbo directo a él. Así pues, los buques de la TF-38 al día siguiente tendrían que enfrentarse a la fuerza de los elementos con vientos que alcanzaron los 120 nudos (220 Km/h).
El ojo del huracán captado por el rádar.
Algunos buques llegaron a inclinarse hasta los 70º, desgraciadamente tres de ellos llegaron a los 180º.
Los pequeños destructores fueron los peor parados al perderse los USS Spence, USS Hull y USS Monaghan, la causa de sus pérdidas fueron que através de las chimeneas embarcaron agua que puso las calderas fuera de servicio, sin potencia ni gobierno quedaron a merced del fuerte viento y oleaje hasta que quedaron con la quilla al aire y se hundieron: el primero a causa de sus vacíos tanques de combustible lo hizo demasiado liviano y los segundos fue todo lo contrario, con 500 tns de desplazamiento por encima de su diseño (de la vieja clase “Farragut” de 1935). Los destructores USS Hickox y USS Maddox se libraron de seguir su misma suerte porque sus capitanes bombearon agua de mar en algunos tanques vacíos de combustible, lo que les permitió ganar estabilidad y salir más o menos bien librados.
A bordo del portaviones ligero USS Monterey las cosas se pusieron muy difíciles y se creyó que se perdería cuando estalló un gran incendio en su hangar al destrozarse muchos de sus aviones y empezar a arder. Los continuos vaivenes de la nave hacían muy difícil combatir el fuego, además continuamente más aparatos impactaban contra los laterales del hangar y estallaban en llamas. Entre los que combatieron el fuego a bordo se encontraba un joven teniente de nombre Gerald Ford, 38º Presidente de los Estados Unidos, que estuvo a punto de caer por la borda en uno de los bandazos del buque que llegaron hasta los 20º.
USS Monaghan
El pequeño destructor de escolta USS Tabberer, habiendo perdido su mástil principal y con ello todas sus comunicaciones, no recibió la orden de Halsey de retornar a Ulithi, y se quedó rescatando supervivientes del desastre: el primero un marinero del USS Hull mientras aún se debatía entre el fuerte oleaje del tifón. Este buque rescataría 41 supervivientes del USS Hull y 14 del USS Spence durante una búsqueda que duro 51 horas, por ello su capitán el Capitán de Corbeta Henry Lee Plage recibiría la Legión al Mérito. Otros buques se sumarian después a la búsqueda de supervivientes, el destructor USS Brown rescataría a todos los supervivientes del USS Monaghan, seis en total, y 13 más del USS Hull. 18 supervivientes más del USS Hull y USS Spence serían rescatados por otros buques junto a dos marineros del USS Anzio (CVE-57) que habían caído por la borda durante el tifón.
USS Hull: 202 tripulantes ahogados, 62 supervivientes
USS Spence: 317 tripulantes ahogados, 23 supervivientes
USS Monaghan: 256 tripulantes ahogados, 6 supervivientes
USS Cowpens: 8 aparatos perdidos, 1 marineros caído por la borda y desaparecido.
USS Monterey: aparatos perdidos indeterminado, 3 hombres fallecidos por incendio.
Se formó un consejo de guerra para investigar el incidente y se encontró al almirante Halsey culpable de “un error de juicio” al llevar a la TF-38 al corazón del tifón, una posible sanción fue obviada por el almirante Nimitz.
Aquí no acaba la suerte de Halsey y los tifones, a principios de Junio de 1945 la TF-38 de nuevo se vio metida de lleno en otro tifón, denominado “Connie”: 6 tripulantes perdieron la vida esta vez junto a 75 aparatos perdidos y otros 70 con daños, un nuevo consejo de guerra se formó contra el almirante Halsey y esta vez se pidió su destitución, pero Nimitz lo pasó por alto argumentando sus “anteriores servicios a la Armada”. De todas formas el 14 de agosto de 1945 fue cesado del mando, ascendido a almirante de flota el 11 de diciembre de 1945 y retirado del servicio en marzo de 1947.
Saludos.